Descubre Cáceres: Tierras da Fala

0

En dirección a Eljas, en la carretera Valverde-Hervás, en el kilómetro 18, pasando los esqueletos de un antiguo invernadero, la Almazara As Pontis seleccióna desde su base las mejores olivas de las Tierras da Fala.

Esta región de Cáceres, en Extremadura, en el secano del Parque Cultural Sierra de Gata, tiene su propia lengua, una mezcla entre el gallego, el portugués y el español que suena dulce y nace para cuidar la tierra y que además, se habla en sus tres variantes – lagarteiru en Eljas, manhegu/mañegu, en San Martín de Trevejo  y valverdeiru, en Valverde del Fresno.

Miguel, su director, me da unas calzas para los pies y me lleva conduciendo su cuatro por cuatro por caminos de tierra entre fincas donde los olivos saludan a quien pasa.

Me explica los diferentes tipos de árbol, cómo reconocer su vejez, su salud, los diferentes tipos de verde y hasta nos paramos a mirar con cariño el olivo más antiguo de la tierra.

Amable y confiado, se pone serio cuando reclama el valor de la tierra. Él apuesta por la sostenibilidad amiga sobre la producción. El mañana cuidando el hoy con mimo. Ama su campo y lo paseamos sin descanso, metiendo hasta los tobillos en la tierra arada, acariciando los árboles, mirando desde la cumbre de la colina el valle y los pueblos, saludando a las cabras que con su función natural limpian los campos y cruzamos puentes bajando a mojarnos los pies en el río y perseguir galápagos que se dejan coger con la mano.

Él sabe que en el campo está su vida y a él la ha enfocado. La tierra, el árbol, la rama, el tiempo, el fruto, la cosecha y después, el aceite.

Somos lo que comemos. 

“Aceite sólo es el que sale de la aceituna”, primera lección.

Obteniendo la excelencia del Aove, producen un aceite ecológico de gran valor y calidad. Me explican el proceso de la recogida, la limpia, la extracción… me muestran las entrañas de esta almazara y tras vivir la experiencia del oleicultor, a la que todos los visitantes pueden acceder como yo, toca la cata de aceites.

La cata se hace con el aceite caliente, el color no es importante. Analizamos la fermentación, el sabor, la intensidad, la humedad, los sabores, el nivel de frutado, amargo y picante y hasta el olor.

El aceite se hace de la aceituna verde y aprendo que el aceite virgen extra es aquél que no puede tener ningún defecto, aquél que se consigue de la mejor aceituna haciendo así diferencia, entre el aceite de oliva y el aceite de oliva virgen extra.

El sabor y el picor en la garganta del virgen extra no tiene comparación alguna. Para cocinar, freír, aderezar. Es el único aceite que debe contener una dieta sana.

La manzanilla cacereña tiene un 80% de oleico, gran sabor y es un aceite especial para el gusto y la salud por sus nutrientes.

Tras mojar pan como una loca y llevarme mi regalado conmigo: Una botella del mejor aceite de oliva virgen extra de la almazara, Vieiru, uno de los cinco mejores aceites de oliva virgen extra orgánicos y ecológicos, con mi nombre grabado sobre la plata, sigo mi camino, gafas de sol y gorro de paja calados, toca recorrer los Canchos de Ramiro.

Sierra de Gata. Experiencia de Oleicultor by WOMANWORD

Sierra de Gata. Experiencia de Oleicultor by WOMANWORD

Sierra de Gata. Experiencia de Oleicultor by WOMANWORD

Sierra de Gata. Experiencia de Oleicultor by WOMANWORD

Sierra de Gata. Experiencia de Oleicultor by WOMANWORD

Sierra de Gata. Experiencia de Oleicultor by WOMANWORD

Sierra de Gata. Experiencia de Oleicultor by WOMANWORD

Sierra de Gata. Experiencia de Oleicultor by WOMANWORD

Sierra de Gata. Experiencia de Oleicultor by WOMANWORD

Sierra de Gata. Experiencia de Oleicultor by WOMANWORD

Sierra de Gata. Experiencia de Oleicultor by WOMANWORD

Sierra de Gata. Experiencia de Oleicultor by WOMANWORD

Sierra de Gata. Experiencia de Oleicultor by WOMANWORD

Sierra de Gata. Experiencia de Oleicultor by WOMANWORD

Sierra de Gata. Experiencia de Oleicultor by WOMANWORD

Sierra de Gata. Experiencia de Oleicultor by WOMANWORD

Share.

Leave A Reply