El Burlador de Sevilla llega a Madrid casi vivo, palpitante, de la mano de un elenco de actores impresionante que dejará boquiabierto a todo al que se atreva a cruzar las puertas del Teatro Español.
Supongo que muchas criticas sobre esta obra harán referencia al contraste creado en escena entre una puesta contemporánea y un texto clásico respetado en su verso incisivo.
Sé que muchos no entenderán los micrófonos, sus cables, las luces, el uso de multimedia en directo creando una ambientación plural que crece y se complementa mientras otros tantos se levantarán de sus asientos casi al comenzar la función atormentados por el cuerpo humano y las pasiones desatadas.
Pero la realidad es que en esta función hablamos de un Don Juan, no de un héroe, hablamos de un egoísta errante, convencido en su bajeza, que no intenta ser justificado y que por supuesto no claudica, ni cambia ni se arrepiente.
Habrá quienes aplaudan al “galán” de agudas palabras y amplia psicología capaz de convencer con promesas vanas y otros que reprueben su actitud hasta el exceso.
Yo, desde mi pequeña butaca, miro con ojitos sonrientes a un Don Juan que se acerca hasta mi fila, entre luces azuladas para apuntarme con un micrófono mientras sonríe altanero.
Yo, desde un cojín de terciopelo rojo, sólo sé hablar de sentimientos que emergen en palabras, de expresiones que me congelan, que me hacen bailar y que me arrastran; de personajes que me hacen fluir con ellos y de mentes que conectan en una escena en la que el instinto es la base y una canción sin pauta aparece y les envuelve.
Esa misma atmósfera atraviesa el patio de butacas y a quienes se dejan contagiar por ella, les regala un momento atemporal en el que desaparecer para reaparecer en un Siglo XVII que no dista en demasía del XXI que vivimos hoy. Por eso, agradezco al equipo salir a calentar delante de un público que toma asiento y muestra, sin misterio, cómo comienza el trabajo interpretativo, cómo ellos se meten, poco a poco, en los personajes a los que darán vida durante dos horas, sin descanso, fuertes, intensos y desgarradores.
Una historia que nos hace replantearnos la necesidad de hacer pagar a quienes nos burlan, a quienes se aprovechan de nosotros, a quienes acaban con nuestra inocencia, a quienes matan la ilusión, a quienes nos utilizan, a quienes no respetan la humanidad que es propia.
Lobos camino a ser descubiertos, política, medias palabras, miradas esquivas, miradas sinceras, muertes, exposiciones y una verdad que al final rompe el juego.
“A sus promesas: Roca”, una frase que debería grabarse a fuego en conciencias más allá del no amor del que habla la obra, de seres desesperados que esperan encontrar respuestas sobre ellos mismos en otros que les complementen.
Diferentes personajes y una misma necesidad: La de ser amados, la de poder confiar en alguien incluso más que en uno mismo. Necesidad que no define el amor y donde el protagonista encuentra su punto de acción, cruel, vil y sin alma, alma que al final, la justicia reivindica, una justicia que viene de más allá, que viene de todos y que crea un final que estalla en silencio entre el estruendo.
Una obra necesaria que expone la verdad de hacer teatro, que arrastra, que contagia y que hace sentir, que plantea una pregunta y deja que cada cual encuentre el momento, ante el espejo, para responderla. Que nos devuelve a nuestros textos clásicos y ensalza la lengua, que aumenta con expresión vocal y gestual y que nos expone, sin medias tintas, a nuestras propias miserias.
No esperaba menos de un equipo tan consciente.
Pronto el vídeo en mi Canal de Youtube
Ellos son
DON JUAN TENORIO Álex García
EL REY Emilio Gavira
DON GONZALO DE ULLOA Eduardo Velasco
DOÑA ANA DE ULLOA Alejandra Onieva
BATRICIO Diego Toucedo
RIPIO Rebeca Sala
DON PEDRO TENORIO Luis Hostalot
EL DUQUE OCTAVIO Rafa Delgado
TISBEA Manuela Vellés
CATALINÓN Agus Ruiz
LA DUQUESA ISABELA Marta Nieto
MARQUÉS DE LA MOTA David Ordinas
AMINTA Judith Diakhate
Con la dirección de Darío Facal
Con el vestuario de Ana López, Rafa Solís y Maya Hansen.
Más Información
2 comentarios
Qué buena pinta tiene esta versión de un clásico!!! Me apetece mucho verla. Alex es un Grande con mayusculas que quiero ver en directo.
Gracias Womanword, siempre atenta para descubrirnos tantas cosas….!!!!
Espectacular obra, todo muy bien cuidado. Muchas gracias Womanword por estar siempre al tanto de lo mejor!