Leer La insoportable levedad del ser de Milan Kundera me ha llevado a los clásicos filosofo-políticos. Con notas descriptivas, agudas, reflexiones importantes, prácticas, plausibles, con corazones intrínsecos y humanos víctimas de sus actos, de sus pasiones, de sus miedos… vidas retratadas entre sus días y el peso de la levedad que oprime al fin y al cabo en personas en búsqueda constante que no hacen más que vagar, tropezar y levantarse.
Descripciones ejemplificadas sobre el amor, las relaciones de pareja, las relaciones con uno mismo, intrincados pensamientos, política, religión, trabajo, la vida en el campo, la vida en la ciudad, los ideales y las vías de escape con citas maravillosas que nos describen desde el kitsch con la palabra exacta.
Citas que calan y que activan el pensamiento hasta los confines más recónditos de nuestro ser. Una de esas lecturas que se echa de menos entre los zafones actuales.
Calidad y mucha ternura despiadada que recuerda sin preavisos que “allí donde habla el corazón es de mala educación que la razón contradiga”, Milan Kundera. La insoportable levedad del ser.